Competencia Perfecta y Competencia Monopolística

2 de mayo 2023

En un modelo económico capitalista como en el que nos encontramos, la competencia es una tendencia habitual entre los diferentes agentes económicos.

 

Algunos economistas establecen distinciones entre la “competencia pura o perfecta” y la “competencia monopolística”.

 

Vamos a ver en qué consisten, cuáles son sus principales características y en qué se diferencian estos modelos.

 

El término “competencia perfecta” hace alusión a un modelo hipotético (y, en cierto modo, utópico) de mercado en el que se produce un equilibrio total de tal forma que ninguna empresa puede influir en los precios, al no tener capacidad suficiente para hacerlo. De esta forma, el precio del producto o servicio se determina exclusivamente por la oferta y la demanda.

 

Este modelo estaría compuesto por una gran cantidad de pequeñas empresas con capacidad de producir bienes o servicios idénticos. Los compradores y los vendedores tendrían así toda la información necesaria sobre los precios y los productos, sin barreras de entrada o salida del mercado.

 

A pesar de ser un modelo prácticamente imposible, pueden llegar a existir ciertas situaciones que supongan un caso bastante similar:

El sector de la compraventa online podría plantear situaciones cercanas a la competencia perfecta. A éste pertenecen plataformas como Amazon o eBay. En algunos casos, los proveedores ofrecen el mismo producto a precios idénticos, independientemente de la plataforma.

Otro ejemplo puede ser el mercado de las divisas, ya que existe una gran cantidad de participantes y el precio está determinado en gran medida por la oferta y la demanda del propio mercado.

 

Vista la “competencia perfecta” llega el turno de preguntarnos… ¿Qué es la llamada “competencia monopolística”?

 

La “competencia monopolística” es un modelo de mercado intermedio entre la “competencia perfecta” y el monopolio (siendo este último la situación en la que una empresa o individuo cuenta con el control total sobre la oferta de un bien o servicio en un mercado concreto).

 

La “competencia monopolística”, de esta forma, está compuesta por una gran cantidad de empresas que producen bienes o servicios similares, pero a su vez diferenciadas por unas características propias, como el diseño, la calidad, la imagen de marca, atención al cliente, etc.

 

El consumidor, de esta manera, demuestra su “lealtad” a una marca en particular, la cual obtiene ventaja y puede permitir, por ello, fijar unos precios más altos.

En este modelo de mercado las empresas suelen invertir en publicidad y estrategias comerciales para destacar sus características y potenciar sus ventas.

 

Es, quizás, el modelo de competencia más presente en la mayoría de los mercados actuales.