La trampa del 'delulu': Una forma de autoengaño en la era digital

En la era digital, surgen constantemente nuevas tendencias y filosofías de vida que capturan la atención de las generaciones más jóvenes. Una de estas tendencias es la filosofía del ‘delulu’, un término que ha ganado popularidad entre la Generación Z, especialmente en plataformas de redes sociales como TikTok.

Originado en la comunidad del K-Pop (pop coreano), donde se utilizaba de manera despectiva para referirse a los fans obsesivos, el “delulu” ha evolucionado hacia una supuesta filosofía de vida positiva que promueve el autoengaño como medio para alcanzar la felicidad y el éxito.

El “delulu” se presenta como una visión optimista de la vida, donde la autoconfianza y la autoafirmación son las claves para lograr metas aparentemente inalcanzables. Esta mentalidad sugiere que pensar en positivo y visualizar el éxito puede estimular la creatividad, aumentar la resistencia emocional y promover el crecimiento personal. Sin embargo, es necesario ir más allá y analizar la potencialmente problemática realidad.

Si bien mantener una actitud positiva puede tener beneficios psicológicos, todos los excesos son malos; y el “delulu”, que promueve una desconexión de la realidad y un exceso de autoengaño, no es la excepción ya que puede tener consecuencias perjudiciales. Vivir en un mundo de fantasía puede llevar a una falta de responsabilidad, dificultades para afrontar los desafíos reales y una tendencia a evitar la realidad. Además, al fomentar una actitud excesivamente optimista, esta filosofía de vida puede generar una sensación de frustración y desilusión cuando las expectativas no se cumplen, lo que puede afectar negativamente la salud mental y emocional de los jóvenes.

Particularmente preocupante es el impacto del “delulu” en aspectos de gran sensibilidad entre los jóvenes, como pueden ser el ámbito profesional y la emancipación. En un mundo laboral cada vez más competitivo, la desconexión de la realidad promovida por esta filosofía puede llevar a una falta de preparación y responsabilidad en el trabajo, dificultando el éxito profesional y la independencia económica. Además, al alentar a los jóvenes a soñar en grande sin considerar las realidades del mercado laboral, el ‘delulu’ puede generar expectativas poco realistas y frustraciones cuando se enfrentan a la dura realidad del mundo laboral.

En lugar de fomentar una actitud irreal y poco práctica, es crucial que los jóvenes (particularmente) aprendan a plantar cara a los desafíos de la vida con realismo y responsabilidad. Solo entonces podrán alcanzar el éxito y la felicidad de manera genuina, sostenible y saludable.